Abriste los ojos del otro lado. Bien abiertos.
Ahora podes ver todo como lo hacías antes.

Cuando te vuelva a encontrar vamos a tener mucho de que hablar, para compesar los años en los que tu luz se fue poniendo cada vez mas ténue. Me vas a enseñar a hacer los pedos de vieja. ¡podría pasarme semanas comiendo solo eso! y lo voy a hacer, ya que supongo que ahí no existen enfermedades ni nada por lo que preocuparse.
Imagino el abrazo que le habrás dado al abuelo. ¡Hablale de las nenas y de mi! cuán hermosas e inteligentes son.
Mirá qué cosa, ayer mientras la familia se juntó a despedirte, Victoria entró a verte muchas veces. Pedía ver a la abuelita. Y yo no pude, no pude. Vos te habías ido, sé que me comprendés.
Me quedo con todos tus besos, mimos, palabras que eran caricias. Tu honestidad y el amor por las cosas lindas de la vida.
Eras calor abu. Lo mas dulce que conocí.
Te amo un montón. Te mando un beso gigante y una bolsa llena de recuerdos para que la compartas con el abuelo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario